Las niñas y adolescentes víctimas de violencia sexual no pueden seguir invisibilizadas

Este día se llevó a cabo la tercera reunión de las mesas de trabajo, con el fin de continuar con la construcción colectiva de la propuesta de política pública de reparación integral y transformadora a niñas y adolescentes víctimas de violencia sexual, embarazo y maternidad forzada.

En la actualidad  cientos de niñas han sido víctimas de violencia sexual embarazo y maternidad forzada sin que hasta la fecha tengan una atención integral para continuar con su proyecto de vida.

La reparación es el último eslabón de la justicia y actualmente la reparación no se hace realidad para las niñas que han sido víctimas de violencia, por lo que su proyecto de vida se ve truncado.

Ante la falta de una política pública que garantice la atención integral y transformadora para las niñas víctimas de violencia sexual embarazo y maternidad forzada, Mujeres Transformando el Mundo en conjunto con la Diputada Sandra Morán coordinan  el proceso de diálogo con las diferentes instancias de gobierno, entes de justicia y diferentes organizaciones que velan por los derechos humanos para que se haga realidad una Política Pública de Reparación  Digna y Transformadora por violencia sexual, embarazo forzado y maternidad forzada para niñas y adolescentes.  

En la tercera reunión de discusión colectiva participaron representantes del Ministerio Público, Secretaria Presidencia de la Mujer,  Consejo Nacional de Adopciones, Defensoría  de la Mujer Indígena, Ministerio de Salud Pública, Organismo Judicial, PROPEVI, Ministerio de Desarrollo Social, Procuraduría General de la Nación así como representantes de diferentes organizaciones que luchan por la defensa de los derechos humanos.

MTM reconoce trabajo de Norma Cruz

El Equipo Multidisciplinario de Mujeres Transformando el Mundo, compartió con Norma Cruz  de la Fundación Sobrevivientes y de su equipo de trabajo, con el objetivo de reconocer la trayectoria de Cruz por los derechos de las mujeres.

Durante el acto, Cruz compartió las situaciones que le ha tocado vivir y la lucha y resistencia que ha tenido que librar para exigir a los entes de gobierno cumplan con sus obligaciones de resguardar la vida e integridad de cada mujer.

“Aunque ya no existe guerra, pero si  siguen muriendo muchas personas a consecuencia de la inseguridad”, dijo Cruz, quien agregó que el trabajo continúa por toda mujer tiene derecho a disfrutar de una vida plena sin violencia.

Por su parte Paula Barrios coordinadora general de -MTM-, aplaudió los procesos de lucha y perseverancia de Cruz y de todo su equipo de trabajo resaltando que ha sido un aporte fundamental para que las mujeres tengan acceso a la justicia.

MTM participa en Primer Encuentro departamental en el Quiché

Parte del equipo Multidisciplinario de Mujeres Transformando el Mundo, participan como invitadas especiales en el Primer Encuentro Departamental de Comités y Clínicas de Atención a víctimas sobrevivientes de violencia y maltrato infantil realizado en el departamento de Quiché.

Durante el encuentro se compartieron informes desde cada municipio donde reflejaron la atención psicológica por maltrato infantil que se da en todo el departamento. Asimismo se dio a conocer que se han incrementado los casos de abuso sexual a niñas donde también se han incrementado los casos de embarazo y maternidad forzada a niñas y adolescentes.

Se dio a conocer que Nebaj es el municipio que registra mayor índice de casos de violación sexual (26 casos)  de los cuales 14 sufren un embarazo forzado.

Geraldina Barreno parte del equipo multidisciplinario de MTM participante de la actividad, señaló que como organización de mujeres que atiende a víctimas de violencia y violación sexual, es un reto en continuar con la atención efectiva e integral para todas las mujeres de diferentes edades que requieran de acompañamiento integral.  

Exigimos cumplimiento de la primera sentencia de reparación transformadora a favor de las niñas Chajón Castro víctimas de violencia sexual

El Estado de Guatemala debe cumplir con una reparación transformadora ordenada por un tribunal a favor las hermanas Chajón Castro víctimas de violación sexual y una de ellas víctima de violación sexual  embarazo y maternidad forzada.

Después de haber dictado 210 años de prisión en contra de Domingo Castro Alvarado por haber violado a sus dos nietas de 11 y 13 años respectivamente, el juez Unipersonal de Sentencia de Femicidio de Quiché Fredy Cano Afre, ordenó se cumpla con la reparación transformadora a favor de las hermanitas Chajón Castro.

Desde la estrategia de litigio, Mujeres Transformando el Mundo -MTM-, logró establecer desde la etapa intermedia que se juzgara  diez hechos nombrándose la violencia sexual que las dos niñas fueron objeto por parte del abuelo materno.

En la audiencia de reparación El Tribunal ordenó que el Ministerio de Educación otorgue Beca de estudio completa a las dos niñas que fueron violadas por su abuelo materno y a favor de la hija de una de ellas consecuencia de la violación.

Además se ordenó al Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social la atención psicológica de las hermanas Chajón Castro y de la hija de una de ellas, al programa de Salud Mental con el objeto de brindar herramientas que les permitan reducir el impacto de los hechos negativos y la recuperación de su proyecto de vida.

Para garantizar la no repetición de los hechos el Tribunal ordenó al Ministerio de Educación incluir en el currículo nacional base la orientación e información necesaria y las medidas de autoprotección dirigidas a la niñez y adolescencia, con el objetivo de prevenirles sobre los riesgos de ser víctimas de delitos sexuales.

Asimismo entre las medidas de reparación ordenadas por el Tribunal, se ordenó  a la Academia de Lenguas mayas la traducción y socialización de la sentencia para ser difundida en la Aldea Pacuch y en Sacapulas Quiché, por los medios más idóneos que estén disponibles en ambas localidades. Asimismo se ordenó a la radio Nacional TGW el diseño y difusión de cuñas radiales para que se conozca la sentencia condenatoria.

La Sentencia penal donde se condenó a 210 años de prisión a Domingo Castro Alvarado, es histórica porque se hace justicia a las hermanitas Chajón Castro, además generó un impacto a nivel local, regional y nacional por el número de años que debe permanecer el condenado en prisión.

Mujeres Transformando el Mundo logró posicionar la Primera Sentencia de Reparación Transformadora a nivel nacional en casos de violencia sexual actual, donde se reconoce que las víctimas no deberán volver al estado en que se encontraban anteriormente, sino con un proyecto de vida distinto con un enfoque transformador.

Antecedentes:

Los delitos cometidos por Castro Alvarado abuelo materno de las hermanas Chajón Castro, sucedieron de octubre 2014 a enero de 2015.  Por las violaciones cometidas en contra de su nieta mayor nació una bebé el 22 de julio de 2015.

Después de que la hermana mayor se sintiera afectada de su salud, la madre de las niñas la llevó al hospital, donde después de haber sido examinada le dieron la noticia que la niña estaba embarazada.

Domingo Castro fue capturado el 29 de abril de 2015 en el sector la Calera Santa Cruz el Quiché.

En julio de 2015 Mujeres Transformando el Mundo se querella en el caso y da acompañamiento legal a la familia Chajón Castro.

El caso se desarrolló en trece audiencias

La sentencia condenatoria fue dictada por el Tribunal el 1 de septiembre de 2016, donde Domingo Castro es sentenciado a 210 años de prisión por los delitos de: seis hechos de  violación con agravación de la pena y circunstancias especiales de agravación en contra de su nieta mayor.

Por tres hechos de violación con agravación de la pena y circunstancias especiales de agravación. Y un hecho de tentativa de violación con agravación de la pena y circunstancias especiales de agravación 

La sentencia de reparación fue dictada el 6 de septiembre de 2016.

Una propuesta para despenalizar el aborto? No, una propuesta para reparar a las víctimas de la violencia sexual

POR CLAUDIA PALACIOS

cpalacios@lahora.com.gt

Una propuesta de la diputada Sandra Morán, del partido Convergencia, llamó la atención debido a que trata un tema polémico: el aborto. Sin embargo, el espíritu de la iniciativa no es la despenalización de la interrupción del embarazo, sino generar una discusión para desarrollar una política pública de reparación digna y transformadora para víctimas de violencia sexual, embarazo forzado y maternidad forzada en niñas y adolescentes.

Un informe presentado esta semana por la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) sobre la atención a víctimas de violencia sexual y maltrato reveló que los embarazos en menores de 14 años casi se duplicaron de 2011 a 2015.

El año pasado se registraron un total de mil 271 embarazos de menores de 14 años, lo que supone un 89 por ciento más que en 2011. En tanto, en lo que va del año son ya 878 los registrados.

El marco legal del país tipifica como “estupro mediante inexperiencia o confianza” sostener relaciones sexuales con niñas menores de 14 años y establece penas de meses a dos años para los agresores.

El año pasado se intentó reformar el Código Penal para incrementar la edad a 16 años y subir la pena hasta 12 años de prisión, pero el Congreso rechazó la modificación.

La cultura de la violencia sexual en Guatemala se extiende a todas las edades. Tan solo en los primeros cinco meses del año en curso se denunciaron ante el Ministerio Público (MP) 2 mil 337 casos de delitos sexuales contra mujeres, sector que concentra el 88 por ciento de las agresiones.

El informe de la PDH da cuenta de grandes debilidades en la atención estatal a las víctimas de agresiones sexuales, entre ellas la falta de cobertura por parte de la Procuraduría General de la Nación (PGN), atribuida a problemas presupuestarios, en el acompañamiento a las víctimas menores de edad a lo largo del proceso judicial.

LA PROPUESTA DE DIÁLOGO

En ese contexto, Mujeres Transformando al Mundo (MTM), una organización que acompaña a mujeres sobrevivientes de violencia sexual y de otros tipos de violencia, se alió con la diputada Sandra Morán para generar una propuesta de política pública de reparación digna y transformadora para víctimas de violencia sexual, embarazo forzado y maternidad forzada en niñas y adolescentes,

“En principio es una alianza con MTM, que son abogadas que litigan casos de violencia sexual en niñas y adolescentes. Con base en esta experiencia y a la problemática que ellas conocen de primera mano, empezamos a pensar en la necesidad de encontrar un camino que permita que el Estado genere acciones a favor de la vida de estas niñas, porque el Estado no ha tenido la capacidad de protegerlas en primera instancia”, señala Morán.

Por el momento la iniciativa continúa en fase de construcción y diálogo con las instancias que tienen interés en el tema. “Estamos invitando a distintas organizaciones sociales de mujeres u organizaciones sociales en su conjunto. Yo estoy convocando a la institucionalidad del Estado que tiene que ver con, que tendrá, en algún momento, que hacer algo con respecto a la niña o a las niñas. Está el Organismo Judicial, el Ministerio Público, está la Procuraduría General de la Nación, está Derechos Humanos, está el Ejecutivo y está el Congreso”, aseguró la diputada.

El pasado 28 de julio se instaló la primera mesa de discusión y en agosto se realizó la segunda. De acuerdo con Morán, una tercera reunión se celebrará en septiembre y una cuarta en octubre. “Para entonces ya tendremos muchísimo más claras las distintas acciones que hay que tomar”, explicó.

ENFOQUE REPARADOR Y TRANSFORMADOR

Un diagnóstico de MTM realizado en 2015 sobre la reparación en casos de violencia sexual y otros tipos de violencia contra las mujeres constató que a la fecha no se ha logrado ejecutar ninguna sentencia sobre reparación a mujeres sobrevivientes de violencia.

La reparación es el último eslabón en la cadena de la justicia. La Ley contra el Femicidio establece que después de una sentencia condenatoria debe establecerse un resarcimiento a la víctima, el cual se entiende como “el conjunto de medidas tendientes a aproximar la situación de la víctima al estado en que se encontraría de no haberse producido el hecho delictivo”.

“El resarcimiento deberá caracterizarse por su integralidad y comprende además de indemnizaciones de carácter económico, todas aquellas medidas tendientes a dotar a la víctima de una reparación médica, psicológica, moral y social”, indica la normativa.

Por ello, de acuerdo con Paula Barrios, directora de MTM, la iniciativa para una política a favor de las niñas y adolescentes víctimas de violencia sexual busca desarrollar mecanismos para que puedan continuar con sus proyectos de vida.

Aunque, en parte, es el agresor quien debe asumir la reparación, según Barrios el Estado también juega un papel importante. “Las directrices de la ONU para la reparación de violencia sexual en contextos de conflicto y posconflicto establecen cinco principios: restitución, rehabilitación, indemnización, medidas de satisfacción y garantías de no repetición. Eso es como un esquema. Dentro de esos principios se encuentra la reparación que le corresponde al Estado, a parte de la reparación que debe cumplir el condenado”, indica.

LA POLÉMICA

Pese a que aún no existe una iniciativa formal de política, ya se han esbozado algunas propuestas de atención al problema.

Una de ellas es dar a las víctimas la posibilidad de interrumpir el embarazo; sin embargo, Barrios aclara que no es uno de los temas centrales, ni el objetivo de la iniciativa.

“Hay medidas inmediatas que se podrían tomar antes de que existiera una sentencia, y ahí es donde nosotros hablamos de la posibilidad de interrumpir el embarazo en casos de violencia sexual. Esto es solo una de las opciones, otra puede ser la adopción y otra puede ser proveerle a esa niña todo lo necesario para la manutención del niño. Lo que sucede es que actualmente esa responsabilidad ha quedado únicamente en atribuir a la niña, como única responsable de ese niño o niña que nace a consecuencia de una violación”, explica.

En cuanto a la polémica desatada, Sandra Morán señala: “Estas niñas no fueron protegidas ni por el Estado, ni por su familia. Al revés, muchos familiares son los que provocan ese estado en el que ellas se encuentran. Resulta que las niñas son forzadas porque no hay otra opción más que tener el bebé, esa es la única opción que tenemos ahorita, son forzadas y resulta que tienen el bebé ¿y qué pasa con ellas? tienen 10 años y tienen un bebé. No estamos hablando del aborto como una única solución, lo que pretendemos en un diálogo para desarrollar un cumulo de acciones reparadoras, donde el Estado en conjunto tiene que actuar, hay toda una cantidad de instituciones que tienen que ver con la vida de esa niña”.

OPOSICIÓN

Sin embargo, algunos sectores religiosos y conservadores ya expresaron su oposición al proyecto propuesto por MTM y Convergencia.

Karly Rodríguez, de La Familia Importa, una de las organizaciones que se ha pronunciado contra la política señala que ya existen las leyes que permiten una atención adecuada a las víctimas de violencia sexual, así como recursos destinados a este fin, “el problema es que no se cumplen”.

“(A la víctima) debe proveérsele apoyo psicológico de inmediato, el Estado podría valerse de los recursos con los que ya cuenta y podría apoyarse para esto en universidades y otras instituciones que ya ayudan en este sentido. La víctima de abuso ha sufrido amenazas, manipulación psicológica, abuso sexual, y el embarazo lo que ha hecho es ponerlo en evidencia. No se le debe tratar por el embarazo, sino por todo lo que ha sufrido antes del embarazo a manos del agresor”, explica.

La principal preocupación de La Familia Importa es la propuesta de interrupción del embarazo. “Se asume que las víctimas desearían naturalmente tener abortos cuando hay estudios que indican lo contrario en un altísimo porcentaje. Hoy día se plantea el ‘Protégeme del embarazo’ cuando a la víctima debemos protegerla del agresor”, señala.

“La Asociación La Familia Importa sirve de plataforma ciudadana para la defensa de los derechos humanos fundamentales, siendo el más fundamental de ellos el derecho a la vida. Trabajamos con otras 42 organizaciones, algunas de ellas que trabajan para ayudar directamente a la mujer con embarazos en una situación de dificultad y sabemos que las mujeres, adolescentes y adultas, salen adelante si se les presta una ayuda adecuada y de acuerdo a su dignidad”, agrega.

“Lo que sucede es que actualmente esa responsabilidad ha quedado únicamente en atribuir a la niña, como única responsable de ese niño o niña que nace a consecuencia de una violación”. Paula Barrios, de Mujeres Transformando el Mundo

 

Reconocimiento al Trabajo del Señor Alberto Brunori

Las Valientes Mujeres de Sepur Zarco y el equipo multidisciplinario de Mujeres Transformando el Mundo -MTM-, reconocen el trabajo de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), a través del señor Alberto Brunori.

“Tengo en mi corazón dos sentimientos,  por un lado feliz de compartir con usted, y por otro triste que se va del país”, dijo una de una de las valientes mujeres de Sepur Zarco integrante de la Colectiva Jalok U; al agradecer y reconocer el trabajo a favor de las mujeres.

Las valientes mujeres también aprovecharon el espacio para compartir la situación que vida que enfrentan día a día en sus comunidades. “Para nosotras la vida es difícil en nuestra comunidad, nuestros hijos no tienen estudios, ellos son campesinos pero no tienen donde trabajar”, dijo una de ellas.

Otra abuela dijo: “Estamos esperando la reparación en nuestra comunidad, para nosotras es importante que llegue pronto porque ya somos mujeres grandes, esperamos la reparación para que nuestras hijas, hijos  y nuestros nietos puedan ver el resultado de la lucha que nosotras hicimos”, dijo.  

Las mujeres hicieron entrega al señor Brunori de un (morral) prenda que ellas elaboraron y de una fotografía donde se plasma al grupo de las mujeres integrantes de la Colectiva Jalok U.

Por su parte Alberto Brunori la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) indicó: “Me siento muy honrado de compartir con ustedes, y ustedes deben sentirse muy orgullosas de haber buscado la justicia a pesar de todas las dificultades, este es un precedente para que  las violaciones  como las  que sufrieron las mujeres de Sepur Zarco  no se vuelvan a repetir”.

Paula Barrios coordinadora general de -MTM-, reiteró la valentía de las mujeres q´eqchi´ de haber decidido enfrentarse a la justicia y ahora contar con una sentencia condenatoria, pero refirió que la lucha no termina, ya que se continuará exigiendo el cumplimiento de las medidas de reparación para las valientes mujeres, sus familias y sus comunidades.

Asimismo agradeció y reconoció al representante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), el acompañamiento que brindó durante su estadía en Guatemala e instó a continuar la lucha en contra de la impunidad.

El acto de agradecimiento se concluyó con una oración dirigida por las valientes mujeres de Sepur Zarco; pidiendo al Creador por la vida de quien estuvo al frente de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH).

Después  de seis años de permanecer en Guatemala, Alberto Brunori dejará nuestro país para asumir como representante de la Oficina regional para Centroamérica en Panamá