Este #8M de Marzo paramos

Por la violencia sexual que a diario viven niñas, adolescentes, jóvenes y mujeres, la cual es un fenómeno social de carácter histórico, que afecta su integridad física y emocional, a sus familias y sociedad en su conjunto como victimas colaterales, en el que se manifiestan las relaciones desiguales de poder por medio de la expropiación de su cuerpo. Por que el Estado de Guatemala, ha ejercido una violencia política y obstaculiza al acceso a la justicia para las mujeres.

POR EL DESAPRENDIZAJE, el cual se convierte en un acto de transgresión educativa, especialmente frente a los cautiverios en que viven –vivimos- las mujeres. “Cautiverios” es una categoría construida por Marcela Lagarde, que define el estado de las mujeres en el mundo patriarcal, caracterizado por la privación de la libertad, por la opresión: “Las mujeres están cautivas porque han sido privadas de autonomía vital, de independencia para vivir, del gobierno de sí mismas, de la posibilidad de escoger y de la capacidad de decidir sobre los hechos fundamentales de sus vidas y del mundo”.

Por el derecho de decidir sobre nuestros cuerpos y tener acceso y ejercicio de los Derechos Sexuales y Reproductivos. Porque las abuelas de SEPUR ZARCO, sus familias y comunidades, tienen derecho a una vida plena, exigimos al Estado de Guatemala el cumplimiento de las medidas de Reparación Transformadoras dictadas en sentencia por un Tribunal Guatemalteco.

 

[1]

Lagarde, Marcela. (2006). Los cautiverios de las mujeres: madresposas, monjas, putas, presas y locas. Colección Posgrado. 4ta. Edición. México: UNAM. Página 37.